Realimentación del odio

Después de la retirada de Gaza, Israel tenía que decidir qué hacer con las sinagogas que quedaban. Unos querían echarlas abajo antes de la entrega a los Palestinos para que estos no las profanasen y otros las querían dejar en pie para no ser los mismos judíos quienes destruyeran su templo sagrado.

Pues ganaron los segundos, es decir que se dejaron en pie.

Ahora llegan los Palestinos e incendian todas las sinagogas que van encontrando a su paso.

¿Qué consecuencias acarrea esto?

Los judíos han optado por la segunda opción a sabiendas de que los Palestinos harían lo que están haciendo y de esta manera mantener el odio en su país contra ese pueblo.

Una entrada del pueblo Palestino moderada en su actitud los hubiese beneficiado mucho más a los ojos del mundo y del pueblo de Israel.