El control del petróleo iraquí

Un estudio llevado a cabo por la organización Oil Change International expone que los acuerdos sobre explotación de crudo que el gobierno iraquí está negociando con empresas multinacionales podrían representar pérdidas de 194.000 millones de dólares para este país, y la transferencia de más de dos tercios de sus reservas a manos de firmas extranjeras.

Estados Unidos, Gran Bretaña y sus empresas petroleras serán las que controlarán los recursos petrolíferos de Irak.

Con el contrato que se prevee adoptar, las empresas extranjeras se asegurarán unos beneficios de entre el 42 y el 162%. El porcentaje de margen normal en la industria suele ser de un 12%.

Las petroleras de Estados Unidos y Gran Bretaña presionaron para que se establecieran estos márgenes como condición para invertir en Iraq, justificando la inseguridad y la inestabilidad política que vive el país.

"Estos contratos son costosos y antidemocráticos", según Greg Muttitt, de Platform, una organización de vigilancia de la industria petrolera con sede en Londres. "El petróleo de Iraq debería beneficiar al pueblo iraquí, no a las empresas extranjeras".